Triathlon Vitoria: Ya soy medio de hierro, ¿y ahora?
- Me ha quedado la crónica más larga que el triatlón así que para no aburrir haré una tricrónica: precarrera (aquí) , carrera (aquí) y post. Hoy, el después…
Terminar la carrera y abrazarte con los tuyos… ¿Hay algo más grande? Cuando tu crees que no puedes estar más guarro aún hay algo peor y es guarrear a los que te acompañan y llenarles de sudor. Pero qué más da ya… ¡FINISHER! ¡FELIZ! Estaba bastante descolocado en este momento… Deambulas por la zona de meta hidratándote, comiendo algo, mirando la medalla y tu camiseta de finisher, comiendo algo más, bebiendo, hablando con tu familia, con otros corredores (en especial con ese descalificado que llegó a meta pese a las trabas de un juez), comes algo más… y a la ducha. A vestirte con tu camiseta de finisher…
Unos pinchos en un bar recomendado y llegó el momento de despedirse de Vitoria… pero no del todo. Mientras comía seguía a Marco (@Marcus_Brabus), el amigo de mi hermano, que estaba ya en su segunda vuelta de la maratón. Sabía que tenía que pasar en 15-20 minutos así que decidimos quedarnos a animar un poco. Quizá devolviendo un poquito de lo que esa ciudad me había dado.
Las caras de los corredores eran… indescriptibles. Sufrimiento, cansancio, dolor o tensión eran solo algunas de las imágenes que vimos pasar por delante de nosotros. Animábamos al que se veía mal y al que se veía bien, que la ganadora pasó por delante en plena exhibición. Entonces apareció Marco… Le grité, le animé, traté de correr a su lado 20 metros, hasta que mis gemelos amenazaron con subirse. Él me vio, me puso cara de vaya infierno (pero iba rápido) y me choco la mano… Ahí siguió y termino la carrera en unos meritoros 11:13:18, TIEMPAZO. Enhorabuena por tantos meses de esfuerzo y tan buen resultado.Ahora sí nos fuimos en busca de la bicicleta, al coche y de vuelta a Madrid con una sonrisa de oreja a oreja.
¿Y ahora qué?
Unos días después no puedo olvidarme de todos y cada uno los que me habéis apoyado, ayudado, confiado en mí, dado una frase de aliento, aguantado mis entrenamientos y las charlas monotemáticas, sacrificado cosas y animado en Madrid y en Vitoria. Lo hacéis todo mucho más fácil. GRACIAS.
También me quedo con una frase que para mi encierra el secreto de todo y que veo cada día antes de entrar a la piscina. “Hay demasiado énfasis en el éxito y en el fracaso, y muy poco en cómo la persona progresa a través del esfuerzo. Disfruta del viaje, disfruta cada momento y deja de preocuparte por la victoria y la derrota”. (Matt Biondi, nadador). Entrar a la meta es espectacular pero el camino que recorres, aunque menos lucido, da para aprender, escuchar, conocerte, evolucionar… Ha sido duro pero increíble.
¿Lo próximo? Pues dije que en 2016 iba a hacer un Ironman, pero a día de hoy no lo creo. No quiero hacerlo porque toque, ni porque era el plan establecido. Quiero hacerlo porque crea que es el momento, que puedo hacerlo bien, que me apetece de verdad y sabiendo que los sacrificios (que serán el doble) merecerán la pena. Me apetece hacerlo, aunque quizá ahora por el cansancio, por la carga de trabajo o por ‘miedo’, por qué no’, crea que debo dejarlo para más adelante… Sin hablar del dineral que cuesta.No hay nada decidido.
Feliz verano a todos, a descansar, a seguir haciendo deporte pero ya no por entrenar sino por disfrutar. Y en septiembre habrá que buscar nuevas aventuras. Porque esto no se acaba aquí, NO SÉ SI EN 2016, O 17, O 18 PERO… VOY A SER UN IRONMAN.
GRACIAS A TODOS